Sonará como atrevimiento y lo es, aunque nunca será comprendido por quien debería.

Siempre me ha parecido que reducir cualquier cosa a estos renglones es hacerles perder su importancia.

Resulta que ésta es la única forma de no cerrar los ojos, ni guardar el silencio necasario. Lo puedo decir y pensar y repetir a solas, sólo a solas.

Aquello se robó esta idea cuando todavía era mía sin que lo supiéramos; con suerte ahora lo sé, pero ya no sirve. Nunca debió servir pues quizás yo ya no recordaría y el sentido sería otro, pero eso tampoco lo sabremos.

Otra vez se llama ironía, se acompaña de miedo y duda que permanecen y lo harán sin cansancio.

.¿El tiempo tiene que pasar tan rápido en un día, para después hacerse lento durante semanas?
¡Ah!

Hoy, por esta noche, necesito entender.